BLUEY cree ser mejor que Bingo y Judo en las anillas, pero su mamá le contará una bonita historia de cuando era bebé con la que aprenderá que no todos somos capaces de hacer las mismas cosas y que crecemos de formas diferentes. Bluey podía rodar e incluso gatear hacia atrás… pero a mamá le preocupaba que nunca aprendiera a andar.